Efesios
3: 13-16 Facetas del sufrimiento
13 por lo cual pido que no desmayéis a causa de
mis tribulaciones por vosotros, las cuales son vuestra gloria.
14 Por esta causa doblo mis rodillas ante el
Padre de nuestro Señor Jesucristo,
15 de quien toma nombre toda familia en los
cielos y en la tierra,
16 para que os dé, conforme a las riquezas de su
gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu;
Comentario:
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Muchas
veces nos desanimamos cuando vemos que alguien sufre por nosotros y más si
estos sufrimientos son para nuestro honor. Nuestros padres que sufren por
nosotros, los hermanos, en algunos casos podemos ver el sufrimiento de un
esposo viejo por su amada esposa enferma y diferentes contrastes nos llevan a
pensar que el sufrimiento se cierne alrededor del mundo en los hogares como
“una plaga” que en realidad no lo es sino todo lo contrario. El sufrimiento ha
servido para que crezcamos, para que aprendamos a conocernos, para domar
nuestro temperamento y acariciar la humildad. El sufrimiento es el maestro que
nos enseña una gran lección llamada vida.
¿Por
qué las tribulaciones de Pablo hacen que los efesios se sientan honrados,
cuando dice: "las cuales son vuestra gloria" (sus tribulaciones)? Si
Pablo no hubiera predicado el evangelio, no estaría en la cárcel, por lo tanto,
los efesios no habrían oído las buenas nuevas ni tampoco se hubieran
convertido.
Pablo
está acabando este capítulo con una oración para que sus amigos no se desanimen
por el hecho de que él esté preso. Podrían creer que la predicación del
Evangelio a los gentiles se encontraría con grandes dificultades porque su sobresaliente
apóstol estaba en la cárcel, pero no, Pablo les recuerda que las aflicciones
por las que está pasando son para el bien de ellos. Pablo avizoraba el futuro,
en cambio ellos no, él veía un gran grupo de gente convertida y ellos no.
Debemos
sentirnos honrados de que otros sufrieran y se sacrificaran antes por nosotros
para que recibiéramos tamaña bendición, quizás hoy tú sufres para la bendición
de otros en el futuro, no lo sabemos!
Rubén
Pelegrina
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